Por Claudio Jacquelin
Los cierres de listas han sido, por lo general, el punto final para las peleas internas y de partida para la disputa con los rivales externos. Ahora, casi nada de eso ocurrió con este trámite para las decisivas elecciones bonaerenses. Los fines de ciclos políticos extensos y los comienzos precarios de era nunca son armónicos. Por eso, ni siquiera ha habido este fin de semana un cierre definitivo de candidaturas en tiempo y forma.
El oficialismo perokircrchnerista corrió los plazos hasta hoy, después de dos sugestivas interrupciones del servicio eléctrico luz, que hicieron posible que los serios cortocircuitos entre kcillofistas y cristicamporistas no terminaran por hacer estallar el sistema partidario.
El peronismo tuvo que pedir prórroga para presentar los nombres en medio de tensiones extremas para acordar entre los sectores identificados con Cristina Kirchner, Axel Kicillof y Sergio Massa tras dos sugestivos cortes de luz en la sede de la Junta Electoral que dieron lugar a que se otorgara un plazo hasta este lunes para completar la carga.
A menos de dos meses de las elecciones bonaerenses, se definieron los candidatos de cada alianza para cada sección electoral. El reparto de lugares en los dos principales frentes, Fuerza Patria y Alianza La Libertad Avanza, generó fuertes fricciones, con heridos relegados y amenazas de ruptura.
Los libertarios sellaron su alianza con Pro, aunque fueron inevitables algunas fugas de intendentes macristas, que se opusieron a ceder en sus distritos. Hubo marginados dentro de LLA y también, algunas sorpresas.